La arquitectura de Nuevo Batzán

Nuevo Batzán, como gran parte de los pueblos perdidos de la región media de España, sobre todo de la Comunidad de Madrid, tiene una historia exuberante, desde su fundación hasta la actualidad. Al visitar el poblado, uno nota inmediatamente el paso de los años, junto con la cultura contenida en los viejos edificios, calles, fábricas y los componentes urbanos.

El plano urbano inicial de Nuevo Batzán fue ideado por el arquitecto español José de Churriguera, que planificó, por pedido de Juan de Goyeneche, un pueblo para 500 personas. Todos estos, principalmente artesanos de la fábrica del vidrio y la cerámica.

La trama urbana de la ciudad primigenia seguía la trama urbana de todas las ciudades españolas de aquella época: un eje ortogonal, cuyo centro de gravedad es una plaza pública flanqueada por una catedral y un palacio o edificio de gobierno.

El arquitecto definió este espacio al estilo barroco, gobernante por aquellos años. Así también, las calles aledañas y las que se dirigían hacia las viviendas y fábricas que se encontraban en las zonas más alejadas del centro de la ciudad.

Las calles reducidas caracterizaban el paisaje urbano y la trama. Casas de uno o dos niveles, hechas de ladrillos, material muy común en la región, de corte riguroso y techumbres de ladrillo.

Con respecto a las fábricas de vidrio y cerámica, no había mucha diferencia entre estas y las viviendas, únicamente en proporción y tamaño.

A partir de mediados del siglo pasado, se han llevado a cabo múltiples reformas a la trama urbana de la ciudad, abriendo pasajes y calles, ensanchando conexiones y creando algunas otras. Además, con la creación de nuevas urbanizaciones, se ha promovido un aumento en la población, la cual proviene desde diferentes países de toda Europa.

Además, hoy por hoy, empresas privadas han invertido en nuevas extensiones del campo urbano, algunas de ellas ubicadas junto a la carretera que une a Nuevo Batzán con Madrid, haciendo aún más atractivo el vivir en un pueblo que crece y se moderniza.

Sumado a estas inversiones, se han abierto otra clase de servicios que mejoran el paisaje arquitectónico del pueblo, como museos, visitas y celebraciones anuales que invitan a visitar la ciudad.